Mata sabe que para meterse a una afición en el bolsillo hay que cumplir a diario. No basta con aprobar un examen. Es una cuestión de evaluación continua. Y para un tío acostumbrado a formarse intelectualmente, el esfuerzo es menor.
El atacante estuvo anoche en el programa 'Tiempo de Descuento' de LAS PROVINCIAS Televisión. Mata no consume (al menos exclusivamente) best-sellers. Escoge los numerosos libros que lee y prueba de ello es que dos de las últimas fueron 'Tokio blues' de Haruki Murakami y 'El guardián entre el centeno' de J.D. Salinger. Con intervenciones cortas, también escogió con esmero sus palabras.
El futbolista confía en que el Valencia mantenga la base de su plantilla después de esta temporada. «Se lleva muchos veranos hablando de que este equipo va a quedar desmantelado y no ha ocurrido. Si nos clasificamos para la Champions, no creo que el consejo lo permita».
El delantero hizo un alegato al valencianismo. Mata cayó bien desde su llegada a la entidad. «Todos tenemos contrato y estamos a gusto. Si alguien decide algo, deberá ser el club». Su rendimiento ha estado incluso por encima de lo esperado y el futbolista está en la capital del Turia como pez en el agua. Algunos de los pesos pesados del vestuario están más cerca que nunca de salir del equipo y la gran referencia, David Villa, no ha dejado de estar en la agenda de los clubes más grandes de Europa.
Y Juan Mata que es un chico educado y culto, pero también avispado, no perdió la ocasión de hacer un guiño a la afición blanquinegra, harta de que a sus estrellas se les maree con cifras astronómicas y dorados deportivos. «Villa es conocido a nivel mundial por sus goles en el Valencia».
La frase da pie a interpretaciones y la más clara es que no hace falta marcharse al Real Madrid o a Barcelona para triunfar en el fútbol. Un puntito de bonificación en ese concurso a murciélago del escudo. Mata se confirmó como buen alumno de Albelda: claro, conciso y sin pelos en la lengua.
Lo hizo al hablar sobre el futuro de su jefe más directo, el entrenador del Valencia, Unai Emery: «Nosotros estamos contentos con él y para el míster, a mayor tiempo que esté en un equipo, más se hará a él. De todas formas, deberá ser el club el que decida a final de temporada si ha cumplido los objetivos marcados antes de renovarle».
Una de las metas del atacante valencianista, por mucho que lo niegue, está en el hemisferio sur. Cuando se le habla de Suráfrica trata de esconder su sonrisa pero no puede evitar que esta florezca. «Con tanto partido, entre domingo y miércoles, no hay tiempo para pensar. De todas formas, es innegable que el año de Mundial resulta un aliciente extra para nosotros».
Mata tiene sus números para estar en la lista de Vicente del Bosque. Para ello deberá seguir brillando a un alto nivel en el Valencia, que tiene ante si el reto de perseguir a los dos primeros en la Liga, Real Madrid y Barcelona. «Queda más de medio campeonato. Todos perderemos y ellos también tendrán que hacerlo algún día».
El futbolista, por lo tanto, tiene los pies en el suelo aunque tampoco descarta que el Valencia pueda dar un disgusto a los primeros. «Ellos están a otro nivel. Aunque nosotros también estamos ofreciendo un buen rendimiento, debemos ser realistas». Mata cree que actualmente resulta más importante distanciar a los perseguidores por la tercera plaza que mirar hacia el liderato por el que se están peleando cada jornada Madrid y Barça.
Elogios a Éver Banega
Juan Mata destacó su sintonía con Éver Banega, al que considera una pieza fundamental en el juego ofensivo del Valencia. «Cuando estuvo aquí antes de marcharse cedido, a mí ya me dio algunos pases geniales que tuve la suerte de convertir en gol. Es una gozada». El delantero elogió en dos ocasiones al argentino: «No se la quitan».
Todos los futbolistas ofensivos, y los no tanto, deberán conjurarse mañana para levantar la eliminatoria de Copa del Rey en Riazor. Mata es consciente de que el Valencia se enfrenta a una misión poco menos que imposible. «Será complicado porque ellos juntan mucho sus líneas y salen a la contra».
Mata reconoció que los equipos que utilizan esta estrategia están poniendo en apuros al Valencia. El jugador blanquinegro halló en esta circunstancia la explicación de que el equipo sume más puntos lejos de Mestalla que en casa.
«Nuestro juego es más de salir con rapidez. Como visitantes podemos jugar al contragolpe. En nuestro estadio, los rivales están metidos atrás y debemos llevar la manija». Y como último punto positivo en ese particular concurso oposición a murciélago del escudo, Juan Mata se comprometió a buscar la remontada en Riazor.
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