Albelda, Baraja, Marchena, David Navarro... y ¿Juan Mata? El campeón mundialista ha empezado a tomarse medidas para que el brazalete de capitán le quede la próxima temporada perfecto. Es la guinda que le falta al 10, más dulce para su currículo. Al fin y al cabo, es un firme candidato a convertirse en uno de los símbolos más importantes del Valencia -lo de haber nacido en la tierra ya no es condicionante- del futuro, con permiso siempre de la Premier.
En Almería este sábado estrenó Mata el rango de capitán del Valencia. Con David Navarro y Vicente fuera de la convocatoria, y César y Joaquín en el banquillo; a Emery le tocó tirar de lógica para elegir qué jugador iba a firmar el acta y a posar para esa foto -que nunca se publica- con los árbitros. Si Miguel no fuera Miguel, el portugués hubiera sido el escogido pero la imagen del Valencia como club se hubiera podido sentir afectada. Después de todo lo que ha protagonizado el portugués, no se le puede dar un brazalete así como así a un futbolista excepcional en el campo pero que acumula actos de indisciplina y sanciones. Antes del partido contra el conjunto almeriense, de hecho, Unai estuvo conversando sobre el mismo césped con Miguel. Buen momento para darle a conocer su reflexión.
En agosto, tras la marcha de Marchena al Villarreal, Emery impulsó las elecciones internas del vestuario para ver qué futbolistas representarían a sus compañeros. Lo de David Navarro, César y Vicente parecía más o menos cantado. La gran sorpresa fue cuando se conoció el cuarto en el ránking: Joaquín. Mata estaba entre los favoritos pero se quedó a las puertas y hubo bastantes aficionados que se sintieron decepcionados. De hecho, hasta se creó un grupo de seguidores en facebook bajo el lema 'Yo también quería a Mata como capitán del Valencia'.
La teoría dice que el capitán de un equipo debe ser alguien que represente al club y dé una imagen correcta de lo que el Valencia quiere ser. Lo curioso es que a Miguel le ha tocado lucirlo en cuatro ocasiones durante la presente temporada, decisión por cierto que levantó críticas.
Al respecto, Miguel tenía muy claro cuál era su respuesta, muy en su línea por cierto. «Es un orgullo ser capitán y lo que digan los demás me da igual. Se basa en la antigüedad del jugador en el club, en la decisión del entrenador y en la votación de los componentes de la plantilla realizada a principios de la temporada».
Este próximo verano, el Valencia sufrirá una interesante remodelación en lo que a su capitanía se refiere. César y Vicente acaban contrato y se hace complicado imaginar pese a su magnífico rendimiento que el veterano guardameta continúe en el equipo.
Habrá que proceder a una nueva elección. Si Unai Emery continúa, no quedará otro remedio que hacer votaciones porque puede darse el caso en el supuesto de que viniera un nuevo entrenador que éste decidiera a dedo el designado para heredar el brazalete. De momento, Mata se estrenó con goleada y contra el Real Madrid puede repetir experiencia.
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