Valencia acomodó su cuenta bancaria con la salidas de Villa, Zigic y Silva y por lo tanto esto significa que la salida de Juan Mata no sería algo imperioso: la economía parece estar en orden y es fundamental conservar en la plantilla un jugador de su talla.
80 son los millones de euros que han entrado a las arcas del Valencia por concepto de traspasos de jugadores, lo que en un primer punto refleja que la economía ché esta saneada y no es necesario seguir dando salida a jugadores importantes. Esto deriva en que el traspaso de Mata a Barcelona podría truncarse.
De todos modos, el coqueteo de Pep Guardiola por el jugador no ha caducado y por ende todo se reducirá a la cantidad de dinero que es capaz de poner sobre la mesa el Barcelona para llevarlo al Camp Nou. Es lógico que si la cifra seduce al Valencia, el equipo ché no ofrecerá resistencia ya que unos billetes de más, nunca vienen mal.
Sandro Rosell es consciente de que Mata no está en el mercado, pero si busca satisfacer a su técnico y se presenta en Valencia con 20 millones de euros, Mata seguramente termine siendo jugador del Barcelona. O sea que, como hoy se dice una cosa, mañana la historia puede cambiar de rumbo. El dinero es capaz de todo.
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