Mata lleva once partidos esta temporada viendo los 90 minutos desde el banquillo.
Juan Mata tiene veinte días por delante para buscar una solución a su mala situación en el Chelsea. Este sábado, el internacional español volvió a ver el partido íntegro de su equipo desde el banquillo por segunda vez consecutiva y undécima en lo que va de temporada. Es evidente que para José Mourinho no es un jugador importante, y el peligro de quedarse sin ir al Mundial sería muy real de continuar en el cuadro ‘blue’ hasta junio.
Ante la cantidad de rumores que en los últimos días asocian el nombre del burgalés con clubes de gran peso en Europa, Mourinho quiso dejar constancia el viernes de que no les había llegado oferta alguna por el mediapunta. Con ese tono seco y oportunista tan típico del técnico luso, Mata fue aún más consciente de que nada de lo que le rodea en su situación actual le va a facilitar las cosas.
Ante el Hull City, el Chelsea volvió a ganar dejando la portería a cero, situación que se repite por tercera vez seguida. El conjunto de Londres se parece cada vez más a lo que su entrenador pretende, coincidiendo con la nula presencia de Mata, nombrado mejor jugador del equipo en las dos temporadas que ha completado allí. La cara de circunstancias con que se le vio en la sucesión de planos televisivos que protagonizó durante el partido de este sábado muestra la amargura de todo un campeón del mundo afectado por el ostracismo al que le ha relegado su entrenador. Y más desde que el día de año nuevo le sustituyera ante el Southampton y el futbolista hiciera gestos de queja. No ha vuelto a jugar.
Barcelona, Liverpool, Mancester United, Manchester City, Inter de Milán, PSG, Atlético de Madrid… La lista de equipos que habrían mostrado interés por rescatarle de las garras de Mou no tiene final. El jugador prefiere un equipo de primerísimo nivel, tal y como ya hemos anunciado en este diario. Y según otras informaciones, Mata estaría esperando a que sea el Chelsea el que se decida a darle salida en este mercado de invierno.
De momento, reina una calma tensa en su caso, pero según se aproxime febrero, las prisas por reconducir su situación irán en aumento. Está en juego su presencia en Brasil con España, y al lado de Mourinho, Mata es cada vez menos importante.
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