El jugador comunica que es la oportunidad de su vida pero en ningún caso forzará una salida traumática del Valencia
T. CALERO/J. ABIÉTAR VALENCIA..-
El fichaje de Mata por el Chelsea es inminente. Venía cociéndose a fuego lento, pero anoche entró en ebullición después de que Mata pidiera al Valencia que escuche la oferta de Abramovich. El asturiano entiende que puede ser beneficiosa para las dos partes. En lo personal se trata de un gran reto futbolístico y si al Valencia le satisface la propuesta del magnate ruso, estaría encantado de ir a la Premier League. Pero Mata dejó claro que sólo se irá en ese caso, si el Valencia también lo desea, porque de lo contrario no tiene problemas en seguir en Mestalla. Ha sido y es feliz jugando para el Valencia.
La situación dio ayer un giro de 180 grados. Llorente necesitaba que entrara en escena el jugador, dado lo impopular de la medida, y este lo hizo después de permanecer hasta el momento al margen, guardando un prudencial silencio. Las preferencias y también únicas opciones que contemplaba Mata en caso de salir al extranjero eran dos: Manchester United y Chelsea. Nunca el Arsenal. El conjunto de Abramovich ha apostado muy fuerte por el asturiano y está a un paso de llevárselo a Stamford Bridge.
Las negociaciones entre el representante de Mata y el club londinense se intensificaron ayer. Venían hablando, tomándose el pulso mutuamente desde hace tiempo, pero ambas partes dieron un paso al frente que puede resultar definitivo para el futuro del jugador. Todo apunta a que habrá venta, aunque siempre que el Chelsea ponga sobre la mesa algo menos de 30 millones de euros, en torno a los 28, la cantidad que pedirá Llorente. Y luego habrá que negociar la forma de pago.
Entre Mata y el Chelsea el acuerdo está prácticamente cerrado. El conjunto londinense ha ofrecido al futbolista un contrato para las cinco próximas temporadas. Incluso le ha propuesto llevar en la camiseta el simbólico número diez, gesto que él valora mucho.
En el Valencia entienden al jugador y no le dificultarán la salida siempre y cuando las condiciones sean satisfactorias para las dos partes. Manuel Llorente no está muy convencido porque sabe que la venta de Mata es impopular -más teniendo en cuenta que la temporada pasada tuvo que afrontar las salidas de Villa y Silva-, pero sabe que si la oferta ronda los 30 millones tendrá que traspasar al asturiano. El presidente del Valencia va a ser muy exigente en la negociación, según apuntaban ayer desde el club, porque el jugador no se ha declarado en rebeldía, sino todo lo contrario. Llorente será inflexible en la cantidad y también en los plazos. El Valencia sólo sellará el acuerdo si el dinero del Chelsea llega pronto. Y preferiblemente de una sola tacada, dada la economía de guerra del Valencia y la necesidad de afrontar incorporaciones.
Mata tampoco quiere salir de cualquier manera. Es uno de los capitanes del Valencia, lleva cuatro años en el club y en estos momentos se trata del jugador más representantivo de la plantilla. El día de la presentación recibió una ovación inolvidable por parte de Mestalla. El público, con sus aplausos, expresó a Mata su deseo de que siga en el Valencia y lidere el proyecto.
El paso que ha dado Mata pidiéndole al club que escuche la oferta del Chelsea no ha sido nada fácil para el asturiano. Cuentan sus allegados que, tras el partido de presentación en Mestalla, llegó a casa con los ojos vidriosos, a punto de llorar. Mata había sentido más que nunca el calor de la parroquia valencianista. Fue el jugador más arropado, el más aplaudido. La grada le había tributado trato de estrella, como antes hicieron con Villa o Silva. La noche de la presentación, Mata sintió que no podía fallarle a la afición. «Cómo voy a marcharme en estas condiciones», dijo a su familia.
Por ello ha dado al Valencia la oportunidad de negociar con el Chelsea y convenir las condiciones del traspaso. Y por eso, si finalmente no hay entendimiento entre clubes, Mata se quedará en Valencia para ser el líder.
Torres, uno de los artífices
Uno de los grandes artífices de la operación ha sido Fernando Torres, que en los últimos días no ha dejado de escribir mensajes y telefonear a Mata hablándole de las virtudes del Chelsea. El madrileño fue el último gran capricho de Roman Abramovich y su adinerado Chelsea. El delantero, deseo personal del magnate ruso, llegó al club del sur de Londres por 58 millones el pasado invierno. Abramovich apostó por él y lo quiere contento y motivado. Y la última petición del ariete del Chelsea tiene nombre y apellidos: Juan Mata. Añora sus asistencias.
El asturiano no ha dejado en los últimos días de recibir mensajes de Torres para que le acompañe en su aventura londinense. Sin demasiada suerte hasta el momento en los meses que lleva defendiendo la camiseta del Chelsea, el madrileño está convencido de que Mata -compañero en la selección y gran amigo- sería su asistente ideal. El soplo de aire fresco necesario para quebrar la tiranía que el Manchester United ha impuesto en la Premier los dos últimos años.
Con Fernando Torres actuando de martillo pilón en esta historia y el beneplácito del técnico, Villas-Boas, es más fácil entender el fichaje de Juan Mata por el Chelsea. Mata se uniría así al madrileño, a Drogba o Lampard, Cech o Kalou... un equipazo de auténtico ensueño para optar a todo la próxima temporada en Inglaterra y Europa.
http://valenciacf.lasprovincias.es/noticias/2011-08-20/mata-quiere-irse-chelsea-20110820.html
T. CALERO/J. ABIÉTAR VALENCIA..-
El fichaje de Mata por el Chelsea es inminente. Venía cociéndose a fuego lento, pero anoche entró en ebullición después de que Mata pidiera al Valencia que escuche la oferta de Abramovich. El asturiano entiende que puede ser beneficiosa para las dos partes. En lo personal se trata de un gran reto futbolístico y si al Valencia le satisface la propuesta del magnate ruso, estaría encantado de ir a la Premier League. Pero Mata dejó claro que sólo se irá en ese caso, si el Valencia también lo desea, porque de lo contrario no tiene problemas en seguir en Mestalla. Ha sido y es feliz jugando para el Valencia.
La situación dio ayer un giro de 180 grados. Llorente necesitaba que entrara en escena el jugador, dado lo impopular de la medida, y este lo hizo después de permanecer hasta el momento al margen, guardando un prudencial silencio. Las preferencias y también únicas opciones que contemplaba Mata en caso de salir al extranjero eran dos: Manchester United y Chelsea. Nunca el Arsenal. El conjunto de Abramovich ha apostado muy fuerte por el asturiano y está a un paso de llevárselo a Stamford Bridge.
Las negociaciones entre el representante de Mata y el club londinense se intensificaron ayer. Venían hablando, tomándose el pulso mutuamente desde hace tiempo, pero ambas partes dieron un paso al frente que puede resultar definitivo para el futuro del jugador. Todo apunta a que habrá venta, aunque siempre que el Chelsea ponga sobre la mesa algo menos de 30 millones de euros, en torno a los 28, la cantidad que pedirá Llorente. Y luego habrá que negociar la forma de pago.
Entre Mata y el Chelsea el acuerdo está prácticamente cerrado. El conjunto londinense ha ofrecido al futbolista un contrato para las cinco próximas temporadas. Incluso le ha propuesto llevar en la camiseta el simbólico número diez, gesto que él valora mucho.
En el Valencia entienden al jugador y no le dificultarán la salida siempre y cuando las condiciones sean satisfactorias para las dos partes. Manuel Llorente no está muy convencido porque sabe que la venta de Mata es impopular -más teniendo en cuenta que la temporada pasada tuvo que afrontar las salidas de Villa y Silva-, pero sabe que si la oferta ronda los 30 millones tendrá que traspasar al asturiano. El presidente del Valencia va a ser muy exigente en la negociación, según apuntaban ayer desde el club, porque el jugador no se ha declarado en rebeldía, sino todo lo contrario. Llorente será inflexible en la cantidad y también en los plazos. El Valencia sólo sellará el acuerdo si el dinero del Chelsea llega pronto. Y preferiblemente de una sola tacada, dada la economía de guerra del Valencia y la necesidad de afrontar incorporaciones.
Mata tampoco quiere salir de cualquier manera. Es uno de los capitanes del Valencia, lleva cuatro años en el club y en estos momentos se trata del jugador más representantivo de la plantilla. El día de la presentación recibió una ovación inolvidable por parte de Mestalla. El público, con sus aplausos, expresó a Mata su deseo de que siga en el Valencia y lidere el proyecto.
El paso que ha dado Mata pidiéndole al club que escuche la oferta del Chelsea no ha sido nada fácil para el asturiano. Cuentan sus allegados que, tras el partido de presentación en Mestalla, llegó a casa con los ojos vidriosos, a punto de llorar. Mata había sentido más que nunca el calor de la parroquia valencianista. Fue el jugador más arropado, el más aplaudido. La grada le había tributado trato de estrella, como antes hicieron con Villa o Silva. La noche de la presentación, Mata sintió que no podía fallarle a la afición. «Cómo voy a marcharme en estas condiciones», dijo a su familia.
Por ello ha dado al Valencia la oportunidad de negociar con el Chelsea y convenir las condiciones del traspaso. Y por eso, si finalmente no hay entendimiento entre clubes, Mata se quedará en Valencia para ser el líder.
Torres, uno de los artífices
Uno de los grandes artífices de la operación ha sido Fernando Torres, que en los últimos días no ha dejado de escribir mensajes y telefonear a Mata hablándole de las virtudes del Chelsea. El madrileño fue el último gran capricho de Roman Abramovich y su adinerado Chelsea. El delantero, deseo personal del magnate ruso, llegó al club del sur de Londres por 58 millones el pasado invierno. Abramovich apostó por él y lo quiere contento y motivado. Y la última petición del ariete del Chelsea tiene nombre y apellidos: Juan Mata. Añora sus asistencias.
El asturiano no ha dejado en los últimos días de recibir mensajes de Torres para que le acompañe en su aventura londinense. Sin demasiada suerte hasta el momento en los meses que lleva defendiendo la camiseta del Chelsea, el madrileño está convencido de que Mata -compañero en la selección y gran amigo- sería su asistente ideal. El soplo de aire fresco necesario para quebrar la tiranía que el Manchester United ha impuesto en la Premier los dos últimos años.
Con Fernando Torres actuando de martillo pilón en esta historia y el beneplácito del técnico, Villas-Boas, es más fácil entender el fichaje de Juan Mata por el Chelsea. Mata se uniría así al madrileño, a Drogba o Lampard, Cech o Kalou... un equipazo de auténtico ensueño para optar a todo la próxima temporada en Inglaterra y Europa.
http://valenciacf.lasprovincias.es/noticias/2011-08-20/mata-quiere-irse-chelsea-20110820.html
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